Hace más de 16 años, en el pintoresco pueblito de Tello, nuestros caminos se cruzaron y nació una amistad que florecería en el amor más puro. Aunque en un principio intentamos ser novios, el destino nos tenía reservado un plan más grande. Con el tiempo, aprendimos y crecimos, y finalmente, nos dimos cuenta que éramos el uno para el otro.

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Nuestro primer viaje juntos nos llevó de regreso a Tello, el lugar donde todo comenzó, y donde guardamos un pedazo de nuestro corazón. Allí, hemos visto nuestros sueños tomar forma, como la llegada de Señorazo, y hemos recorrido juntos lugares increíbles. Juntos logramos un sueño hermoso, nos convertimos en papás del ángel más hermoso que tiene el cielo hoy.